Primero azúcar después sal
Eres como la lluvia, que por cualquier ventana se filtra
Eres como el agua nodriza que acurruca sin prisa
Golpeas la piel como flecha dispuesta, cientos a la vez
Provocas jaquecas por caminar bajos tus nubes repletas
Eres como la lluvia, que por cualquier ventana se filtra
Te deslizas bajo el colchón de plumas, empapas y tocar la espalda
turbia y tibia
Cocinas manzana en almíbar y así, enamoras al lobo con las curvas de tus gotas
De sorpresa le arrojas una jarra de salmuera para que pronto se muera
Vuelves y caes desde la nube distante sobre otra piel a retozar
Eres como la lluvia, que por cualquier ventana se filtra
Turbia y tibia, enamoras con azúcar para después matar sin culpa
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